sEñºrEs pªsªjErºs, muy buEnºs diªs, Estªciºn tErminªl, mIliªncºlin... sE lEs ªgrªdEcE viªjªr En nuEstrª cºmpañiª. por su ªtEnciºn muchªs grªciªs.

domingo, septiembre 23, 2007

tallarines


al final nadie se da cuenta de uno .. nadie existe realmente y vivimos solos, en un mundo extraño. en donde lo único que tenemos es a nosotros mismos. mientras los perros pelean y chillan, escribo esto, cuando el mundo me deja sola, sin compañía, sin aferro alguno. trato de estar dentro de mi en mis paredes blancas y acolchadas. mirando el cielo sin hacer nada, un tema se escucha detrás de la puerta sin salida y es el son de un llanto sin compasión. me siento sola. lo se... pero aunque tenga a mucha gente, nadie me llamara, y nadie estar disponible para mi. estoy mejor, aunque sea una mierdix iré a comer tallarines

3 comentarios:

Unknown dijo...

Chuta lokilla...no sabia que estabas asi...

Tu sabi que podi contar conmigo...

El problema...

No se si tu quieres contar conmigo...

(K)

Anónimo dijo...

yo ultimamente creo
que eso que tu dices
es la gracia de la vida

www.yaestoyparami.blogspot.com

Francisco Mora dijo...

al final,
qué tajante en su tajancia
de palabra grave
naiden naiden
nos llamará
deben andar to'o por la cuesta Barriga
de barriga
contando cadáveres
los que con suerte
no tienen atado a la barriga un riel de ferrocarril estatal
y corales en las axilas
de fondo marino
al final
me sabe a mar
a grieta del pacífico
no estamos mejor
que
ese perraje con un riel atravesado
a modo de bozal
de bozal de perro
de vaca y de chancho
que con suerte tendrán un coral en la oreja
dentro de su inmundo cuerpo verde y azul y blanco y perdido.
cascaras de naranja podri'a
velamen grasiento transparente
valemos menos
velamen lamen los corales de los en vela
lavé la vela grasienta
y el velamen etrusco de los rostros miserables.

al final
la cacofonía
y el huacharaje
son migajas sobre las lustrosas botas de mi comandante
la mano a mi visera
aletargan el hambre de mis vísceras
bajo la bandera de la Patria.





vaya qué mundo más extraño.
dijeron desde el Granma.

vaya qué mundo más raro dijo Franco.

Vaya qué mundo más raro canta el carnicero.

Vaya qué mundo más raro esgrime el diplomático.

vaya qué mundo más raro,

al final somos corales
en la pata de palo de un pirata barbón
bebedor de ron.

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